Crónica de un ROBO continuado

Parte VIII

Jorge Ossa Londoño

Profesor demandado, profesor condenado, profesor subrogado

Los tres nuevos títulos, degradantes, que me ha conferido

la Universidad de Antioquia

La violencia empeora la crisis de la Universidad. No es la complejidad de la crisis lo que debe preocupar a la comunidad universitaria; pero sí es de preocupación la estrategia que adoptemos para enfrentar la situación. La universidad es nuestro estadio monumental para la formación ciudadana; las técnicas que también podemos lograr en esta institución son una bonificación, pero nunca el premio mayor. El logro de la ciudadanía es una meta común; esto es, todos tenemos que llegar a ella y, luego sí podremos aspirar a diversificarnos en las diferentes profesiones artes y oficios que, en su conjunto, construirán una sociedad armónica, robusta y funcional. Lo contrario es concederle la razón a Ortega y Gasset que, desde hace casi cien años, sentenció que la universidad sólo produce bárbaros ilustrados.

Pues bien, las crisis son, justamente, uno de los momentos privilegiados para poner en escena las didácticas para la formación ciudadana. Son la oportunidad para ejercitar el pensamiento crítico, la preocupación por el otro y por la suerte de las instituciones y del país; esto es, un ejercicio práctico de intelectualidad. Es claro que la lucha en la universidad, no puede ir más allá del diálogo argumentado; vehementes sí, pero recordando que nuestro campo de batalla es la academia y nuestras armas son las ideas.

Por estas razones vemos con preocupación que nuestra Universidad de Antioquia no se levante, para el análisis de las crisis, desde los salones, desde las agremiaciones, desde los consejos estudiantiles, los consejos de facultad; y que, de la misma manera, no haya documentos y comunicaciones contundentes desde las instancias directivas y superiores. Tampoco parecen existir mesas de trabajos en los diferentes asuntos críticos. Parecería que la estrategia es ignorar las crisis y simplemente esperar… cualquier cosa que pueda pasar.

Para el caso de los profesores de la transición de la ley 100, que hemos sido objeto de violación de derechos adquiridos… y por tanto hemos denunciado la crisis de moralidad, solicitamos la continuación del diálogo que respetuosamente hemos solicitado y que, sistemáticamente, se nos ha negado.

Jorge Ossa Londoño

Septiembre 23 de 2024